El obispo de Segorbe-Castellón, Mons. Casimiro López Llorente, ha anunciado la celebración de una misa funeral por el eterno descanso del Papa Francisco, fallecido el pasado 21 de abril, lunes de Pascua. La ceremonia tendrá lugar el sábado 3 de mayo a las 12:00 horas en la Concatedral de Santa María de Castellón.

La diócesis se unirá así a toda la Iglesia universal en la oración por el alma del Santo Padre, cuya figura ha sido recordada con cariño y gratitud por Mons. López Llorente. En su comunicado, el obispo destaca la misericordia infinita de Dios y expresa su deseo de que el Papa Francisco sea acogido en la gloria eterna del Señor resucitado.

«Francisco fue un hombre de Dios, que supo mostrar la cercanía de Dios a todos, especialmente a los sencillos», afirma el obispo, subrayando la entrega del Pontífice hacia los más desfavorecidos: pobres, refugiados, migrantes, enfermos, ancianos y personas marginadas.

El prelado también ha agradecido a Dios por los frutos del pontificado de Francisco, destacando su llamado constante a la conversión pastoral y misionera, así como su empeño por llevar la alegría del Evangelio a las periferias sociales y geográficas.

La invitación a participar en la misa se extiende a sacerdotes, diáconos permanentes, religiosos, religiosas y laicos de toda la diócesis. A quienes no puedan asistir presencialmente —especialmente enfermos, personas mayores y comunidades contemplativas— se les anima a unirse espiritualmente a la celebración.

Mons. López Llorente ha pedido a los párrocos y responsables de comunidades eclesiales, asociaciones y cofradías que difundan la convocatoria. También ha recordado que el color litúrgico para la misa será el morado, propio de los funerales.

La diócesis se prepara así para rendir homenaje al que fuera el primer Papa jesuita y latinoamericano, cuyo legado ha dejado una huella profunda en la Iglesia y en el mundo.